Hoy hace cien años se disputó un partido de fútbol en Palma que fue diferente a todos los celebrados Entonces el fútbol carecía de
competición oficial, lo practicaba unos pocos privilegiados y ese partido marcó un hito en el deporte local.

Se jugó en el antiguo Velódromo de Tirador y enfrentaba a dos pequeños equipos: el Mecánico, formado por trabajadores de la compañía Isleña Marítima, empresa naviera ubicada en el Moll Vell de Palma; y la Fundición Carbonell, conjunto de la fábrica ubicada en el Hort d’en Moranta (zona actual de Jaume III) y conocida como Can Salí. Ganaron los de Can Salí (2-1) y la crónica poco explica, más que «jugaron duro».

Sendos equipos empezaron a existir pocas semanas antes y eran los dos primeros equipos organizados de clase trabajadora. Entonces el fútbol, como todos los deportes en Mallorca, lo practicaban las clases altas, con más medios y tiempo libre. Así que dicho partido fue señalado en el fútbol local: marcó el inicio del fútbol modesto.

Ambos equipos no tenían medios: presupuesto, estatutos, material… nada. Pero sobrevivieron y en verano de 1920 participaron en uno de los torneos que se jugaban entre los equipos de la ciudad (todavía no existía la Federación Balear). Allí estuvieron, jugando y superando las desigualdades sociales en el terreno de juego. Perdieron casi todos los encuentros, pero entonces no importaba el resultado.

Algunos trabajadores habían intuido las beneficiosas propiedades del deporte para la salud y el ocio. No sólo como espectadores, también como protagonistas. El fútbol les brindó la oportunidad de competir en un ámbito sin distinciones ni privilegios, en igualdad de condiciones contra rivales de todas las clases sociales. Por eso aquel partido jugado el 25 de abril de 1920 fue trascendental.

A finales de 1920 dichos equipos se fusionaron y dieron paso a un nuevo club: el Baleares, que subsiste un siglo después con el nombre
de Atlético Baleares. Por tanto, los primeros baleáricos de la historia fueron aquellos trabajadores de Can Salí y la Isleña Marítima, pioneros de aquel partido jugado ahora hace 100 años.

Manel García para Fútbol Balear.