Alineaciones:
CD Cardassar. Ángel Sánchez, Biel Toni Roig, Pau Soler, Sebastià Coll, Jaume Alzamora, Jaume Fernández, Miguel Álvarez, Adrián Hernández, Christian Mico, Jonathan Martínez y Javier López.
Sustituciones: Julià Llull por Jonathan Martínez min.64, Sergi Febrer por Sebastià Coll min.64 y Jordi Ramis por Miguel Álvarez min.70
AD CF Épila. Francisco Fabre, Iván Garrido, Adrián Molina, José Carlos Gil, Diego Berdún, Jorge Chueca, Hamza Bouayadi, Diego Obere, Chafiq Bouasri, Francisco Turrubia y Luis Esteban Costa.
Sustituciones: Adrián Redondo por Jorge Chueca min.54, Marcos Sánchez por Hamza Bouayadimin.64 e Iván Falo por Adrián Molina min.77.
Penaltis: 0-1, Luis Esteban Costa (Gol); 1-1, Jordi Ramis (Gol); 2-1, Iván Falo (Gol); 2-2, Adrián Hernández (Gol); 2-2, Diego Berdún (Para el portero); 3-2, Julià Llull (Gol); 3-3, Francisco Turrubia (Gol); 4-3, Javier López (Gol); 4-3, Adrián Redondo (Falla).
Árbitro: Antonio Ros Gómez, asistido en bandas por Juan Carlos Samper Portero y Antonio Alarcon Anaya del comité territorial murciano.
Tarjetas: Amarillas para Christian Mico min.20 y Biel Toni min.63 por el Cardassar y para Iván Garrido min.27, Diego Obere min.69 y min.84 y José Carlos Gil min.90 doble amarilla por el Épila
Incidencias: Asiste al partido el presidente de la FFIB Miguel Bestard.
Comentario:
Tarde histórica en Es Moleter, donde, Cardassar y Epila se citaron sobre el terreno de juego para fraguar una gran batalla. La Primera ronda de la Copa del Rey, donde un Primera esperaba. El campo municipal de Sant Llorenç se engalanaba en base a las medidas de seguridad, dejando un ambiente idílico para asumir una gesta de tales características.
El encuentro empezaba con la tensión correspondiente que un partido así requiere. El conjunto local dio el primer toque de tambor, cuando Miguel remataba al travesaño un centro de Cristian. El Epila ya sabía lo que le esperaba en tierras mallorquinas, pero no se amilanó, con una línea de atrás bien armada poco a poco fue anulando el inicio fulgurante de los locales. Sin embargo, el Cardassar volvió a las andadas y está vez fue Jaume Alzamora el que puso a prueba al meta del Epila, pero Francisco Fabre evitó el 1-0. Tras las dos primeras ocasiones del Cardassar, fue el Epila el que puso el miedo en el cuerpo a toda la afición local. Tià Coll erró en un despeje, pero Hamza mandó el balón a las nubes.
El segundo empezó con aún más intensidad, el Cardassar apretó el acelerador y puso contra las cuerdas al conjunto epilano. Sin llegar a generar muchas ocasiones, la sensación era de dominio de los locales, pero con un Epila muy bien plantado en fase defensiva. Poco a poco, llegaron las ocasiones. El conjunto de Sant Lloren puso adelantarse mediante la zurda de Javi López, pero su disparo a bocajarro lo desvió un defensa bajo palos. Es Moleter sabía de la importancia de estos minutos y empezó a apretar de manera incesante. El Cardassar jugaba con 12, gracias a una afición entregada.
En los últimos quince minutos, el Epila dió un paso adelante y pudieron dejar el encuentro muerto con una doble ocasión. Costa remató de cabeza un centro medido desde la banda, pero Ángel apareció haciendo honores a su nombre. Segundos después, el meta local, volvió a aparecer para salvar a sus compañeros. Con este arranque del Epila, una expulsión en el minuto 83 de Obere cambió de nuevo el rumbo del encuentro. El Cardassar metió una marcha más, pero el tiempo no fue suficiente, solo dos centros laterales que no encontraron rematador fueron el bagaje ofensivo en los últimos minutos del tiempo reglamentario.
El partido se iba a la prórroga y todos los corazones presentes en Es Moleter se resentían. El tiempo extra empezaba con un remate de Adrián Hérnandez era el primer acercamiento del Cardassar. El Epila respondía a base de intensidad y de balones largos buscando las carreras de sus puntas. El encuentro entraba en una dinámica de miedos enfrentados en los que ninguno de los dos quería arriesgar demasiado.
El conjunto local se encomendaba a Jaime Férnandez y su velocidad para inquietar a la defensa rival, pero solo fue a base de balón parado que se acercó al tan ansiado gol. A falta de pocos minutos, Pau Soler tuvo en su mano ser el héroe de su equipo, pero su remate de cabeza le salió alto por poco.
Tras 120 minutos de igualdad, ambos equipos tenían que recurrir a la tanda de penaltis para decidir quien pasaba de ronda. El Carde rezó a todos los ángeles para poder llevarse este gran premio y ahí apareció su portero. Primero para detenerle el penalti a Diego Berdún y negarle el gol. Luego para aliarse con esos santos que solo tienen los buenos porteros y seguir con la mirada el lanzamiento de Adrián Redondo que mandaba al larguero para júbilo de todos los presentes en Es Moleter.
El Cardassar pone los dos pies en la Copa del Rey en un partido donde hubo todo lo que se necesita para pasar a la historia del club y del pueblo. Un pueblo unido que ve en su equipo el fiel reflejo del trabajo, sacrificio y humildad. Desde el palco, el presidente de la FFIB, Miquel Bestard disfrutando de una clasificación histórica del conjunto del Llevant de Mallorca.
Pascual Ribot para Fútbol Balear.
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