El Cardassar disputa hoy el partido que jamás soñó, el más importante en sus noventa y seis años de vida. Suena a fantasía, pero el todopoderoso Atlético de Madrid visita Es Moleter en un duelo que, pase lo que pase, será para siempre. Y por eso debe salir a competir en esta primera ronda de la Copa del Rey con el orgullo del que se ha ganado un premio de este calibre, por muy gigantes que sean los que están en la otra parte del campo.

Los de Miquel Àngel Tomàs han llegado hasta aquí porque se proclamaron campeones de Mallorca, de Balears y después obtuvieron el billete definitivo al apear en los penaltis al Épila aragonés. Hoy será otra historia, es evidente, pero a los mallorquines no les queda otra que salir con el cuchillo entre los dientes para dar la talla justo cuando saben que los ojos del fútbol nacional estarán pendientes de ellos. Arropados por 305 orgullosos espectadores, la covid no deja más, el coraje de Sant Llorenç deberá notarse desde el principio.

El técnico porrerenc, que tiene la baja de Cristian Mico, dispone de diecinueve futbolistas para el duelo ante los de Simeone. Todo apunta a que apostará por una defensa de cinco para tratar de sentirse más arropado, una opción que en la competición de Tercera División solo se usa como recurso. Pero la intención es resistir lo máximo posible, por lo que delante de Ángel Sánchez formará una línea de tres centrales con Tià Coll, Sergi Febrer y Pau Soler, con Biel Toni y Stefi Bona en los carriles. Jaume Alzamora ocupará el pivote, mientras que el ataque estará formado Javi López, Jaume Fernández y Adri, justo por detrás del punta Miguel.

El Cardassar, que ocupa la séptima posición en el Grupo A de la Tercera División, se enfrentará al colíder de Primera y recién clasificado para los octavos de final de la Liga de Campeones. Es el desafío más grande posible, pero ya hay muchos ejemplos en el fútbol de que los milagros existen. Sin ir más lejos, los colchoneros, que viajan hoy a la isla, fueron apeados la pasada campaña por la Cultural Leonesa de Segunda B.

Es previsible que el entrenador argentino Diego Pablo Simeone ofrezca una oportunidad a la mayoría de los futbolistas no habituales e incluso a algún canterano, en un partido para el que no contará con Costa, Herrera y Giménez, todos ellos por lesión, ni probablemente con Savic, aquejado de una faringoamigdalitis. Y dará la oportunidad al meta Grbic, fichado en agosto del Lokomotiv de Zagreb. Suárez y Joao Félix descansarán, pero el Atlético es igualmente muy superior. Depende del Cardassar que se note lo menos posible.

 

Diario de Mallorca