Un día, el pasado sábado, ha bastado para que Ernesto Espinosa haya quedado encandilado con la labor táctica del nuevo entrenador del Space Gasifred, Hugo Nava. El ala-pívot tiene buenas sensaciones para el futuro y, al igual que Leo Feitoza y Álex del Amor el día de su presentación, comentó que hay motivos para volver a soñar con la fase de ascenso a División de Honor.

«Personalmente, pienso que tenemos equipo para luchar por el play off. No es que fuera un fracaso no entrar en él, pero hay plantilla para eso y creo que vamos a batallar por la fase de ascenso», comentó el leonés. Pese a que «todavía es pronto» para saber si los fichajes se acoplan bien al conjunto azulino, ‘ER14′ tiene ya un motivo para confiar en esa difícil misión. Se trata del «sistema del entrenador». «Es bueno para la defensa. El sábado bastó para convencerme», explicó el jugador del Space Gasifred.

Además, sabe que las nuevas adquisiciones no tendrán problemas de adaptación: «Ha venido gente joven y un veterano. Cada uno sabe lo que tiene que hacer. Se irán integrando poco a poco y lo conseguirán. Aquí se sabe que todos tenemos muy buen rollo y no tendrán ningún problema».

Ernesto comentó que los rivales a tener en cuenta en la zona alta son «el Puertollano, que seguro que estará arriba; el Andorra; y el Burela. También habrá que tender cuidado con El Pozo B y el Barcelona B, porque los filiales siempre dan mucha guerra». Lo que no tiene claro es quiénes pelearán por la salvación. Y es que «cada Liga es un mundo». «Cuando el Atlético de Madrid bajó de Primera División, en fútbol, nadie se lo podía creer. Pueden pasar mil cosas. Conjuntos flojos seguro que no habrá y todos pelearán por conseguir el mayor número de victorias posible», explicó.

Una preparación exigente

Para que el Gasifred aspire a muchos triunfos, ahora está realizando una pretemporada muy exigente. «Está siendo muy dura. Corremos mucho. Sólo hemos tocado balón el sábado y a las 16,00 horas, con un calor tremendo. Está siendo dura, pero al final nos vendrá genial», dijo el ala-pívot, que todavía tiene el brazo derecho escayolado por una fisura en el escafoides», explicó Ernesto Espinosa.

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