El ex jugador de la SD Ibiza, Juan García Segura, ´Juanín´, murió ayer en Granada a los 66 años de edad. Según manifestaron sus familiares, estaba en una cacería en su propia finca acompañado por varios amigos y falleció tras encontrarse mal repentinamente. Los médicos que acudieron al lugar avisados por la familia no pudieron hacer nada por salvarle la vida. Cordobés de nacimiento, jugó en la Sociedad Deportiva Ibiza durante doce temporadas (de la Liga 1965-66 a la 1976-77).

Llegó a la isla después de haber jugado en el Betis, Extremadura, Ceuta y Córdoba. Según relató el propio ´Juanín´ en una entrevista que Tucho Tur le hizo para este rotativo en febrero de 1992, él mismo se ofreció al equipo deportivista a través de un telegrama. «Me enteré que el club estaba buscando un media punta e inmediatamente mandé un telegrama ofreciendo mis servicios. A las 48 horas me ficharon», declaró.

´Juanín´ seguía contando en la entrevista que hizo las maletas y se vino a jugar una temporada, pero que definitivamente se quedó a vivir aquí, al igual que otros muchos futbolistas en aquella época. «Recuerdo que el presidente era Antonio Riera, el entrenador era Andrés Quetglas y estábamos en uno de los de los grupos más fuertes de Tercera División porque estaban el Terrasa, Levante, Girona, Mestalla, etc. Eran los últimos tiempos de Pericás y cuando yo empecé estaban jugadores tan inolvidables como Alfonso, Dávila, Carbonell o Martí Serra».

También recordaba que vino a jugar como centrocampista y que marcaba muchos goles. «Al Ciudadela le ganamos 7-1 y yo metí seis goles», explicaba con orgullo, aunque terminó jugando de lateral izquierdo.

´Juanín´ fue el capitán de Sa Deportiva durante siete años, hasta su retirada con 33 años.

También rememoraba en Es Diari que con el técnico Manolo de la Torre empezó su calvario en el club: «Debía pensar que como yo trabajaba con el presidente, Andrés Villar, le contaba cosas del vestuario, pero tuvo muchos problemas conmigo , con Sáez y también con Prados.

Inclusive estuve a punto de matarlo de un ladrillazo, pero Juan Gallego lo impidió. Si no llega a pararme me hubieran metido en la cárcel».

Tras dejar el fútbol continuó en Eivissa, donde tuvo una fructífera actividad empresarial y donde será enterrado los próximos días.

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