El Mallorca ha trasladado al camerunés Pierre Webó la existencia de una oferta de un club de Arabia Saudí que le propone un contrato por tres años a 1,2 millones de euros por cada uno de ellos. Además, la entidad recibiría dos millones por el traspaso. De momento la respuesta del jugador ha sido negativa, pero tiene todavía tiempo para cambiar de opinión, porque el mercado de fichajes en Oriente Medio se cierre el próximo lunes día seis de septiembre a medianoche.

Webó, que está casado con una española, no desea cambiar de país ni de ciudad, porque se siente muy a gusto en Mallorca y tiene todavía dos años más de contrato, pero su situación deportiva no va a ser sencilla porque Michael Laudrup directamente le ha dicho que si decide quedarse va a partir como el último delantero. Eso significa que por delante de él tendría a Sergi Enrich, Víctor Casadesús y, por supuesto, al argentino Fernando Cavenaghi.

Para el club la posibilidad de realizar esta operación supone una oportunidad irrechazable, porque no sólo significa ingresar dos millones de euros por el traspaso, sino ahorrarse además los dos años de contrato que le quedan al futbolista, que cobra 800.000 euros limpios por temporada, siendo ahora mismo el mejor pagado de la plantilla.

Hay que recordar que ya en el pasado el Mallorca ha realizado operaciones similares con clubes de Oriente Medio, la última de ellas en noviembre de 2006, cuando el argentino Leo Pisculichi fue vendido al Al Arabia de Qatar por tres millones de euros. Pisculicho, por cierto, continúa jugando en el Golfo Pérsico.

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