La copa del Mundo, el histórico trofeo conquistado por la selección española de fútbol el pasado mes de julio en Sudáfrica 2010, podría aterrizar en Eivissa el próximo 5 o 6 de octubre. La Federación de Fútbol de les Illes Balears (FFIB) está a la espera de la confirmación de la Federación Española, aunque todo apunta a que el preciado trofeo realizará una mini gira por el archipiélago para que todos los aficionados puedan ver, fotografiar e, incluso, si es posible, tocar y besar la copa.

Por el momento, lo que es seguro es que el trofeo estará en Palma el próximo 4 de octubre y presidirá la Gran Gala del Fútbol Balear que se celebra en Son Amar y que organiza Ultima Hora. A partir de ahí, la intención es que viaje posteriormente tanto a Eivissa como a Menorca. «La idea es que la copa del Mundo esté unos días en Balears, aunque eso depende de los compromisos que tenga la Federación Española con alguna territorial, porque todos quieren ver de cerca el trofeo. Si nos lo dejan el día 5, la copa está por la mañana en Eivissa y por la tarde en Menorca o al revés. Si la podemos tener también el 6, estará un día en cada Isla», reconoció ayer Manuel Bosch, secertario de la Federación Balear.

La agenda de la copa del Mundo es muy apretada y prácticamente pasará por todo el territorio nacional. En todos los sitios, además, ha levantado gran expectación. De esta forma, el martes estuvo en Ponferrada y ahora iniciará un periplo por Tarragona, primero, y por Valencia y la Comunitat Valenciana, después. Tras su paso por Balears, emprenderá camino a Salamanca, los días 7 y 8 de octubre, coincidiendo con el partido que la selección absoluta disputará en el Helmántico ante Lituania.

Por el momento, el calendario de actos está en el aire, aunque Bosch aseguró que «esperamos que la Federación Española nos responda en breve, porque será muy importante tener el trofeo en todas las Islas. Ya fue todo un éxito en su día tener la copa de Europa de 2008 y, ahora, la del Mundo, es algo increíble. No hay duda de que la fiesta del Fútbol Balear, con el trofeo presidiéndola, será algo inolvidable».

En caso de que llegue a las Pitiüses, habrá que buscar una buena ubicación a la Copa. «Hay que ir con mucho cuidado para no herir susceptibilidades, porque no se sabe, por ejemplo, si conviene más llevarla al Consell o a la delegación del Govern Balear, por ejemplo. Lo más seguro es que esté expuesta en un sitio público para que pueda visitarla el mayor número de personas», añadió Manuel Bosch.

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