Alineaciones:
RCD Mallorca: Rajkovic; Maffeo, González, Raillo, Nastasic, Costa, Babá (Battaglia, 78′) , Ruiz de Galarreta, Kang In Lee (Antonio Sánchez, 78′), Dani Rodríguez (Amath, 67′), Muriqi.
Real Madrid: Lunin; Carvajal, Nacho, Rüdiger, Camavinga, Tchouaméni (Kroos, 71′), Fede Valverde (Modric, 65′), Dani Ceballos (Alaba, 71′), Marco Asensio (Mariano, 71′), Vinícius y Rodrygo.
Gol: 1-0 Nacho(13′), en propia puerta.
Árbitro: Alejandro José Hernández Hernández asistido en bandas por José Enrique y Naranjo Pérez y Diego Sanchez Rojo. 4º árbitro Abraham Domínguez Cervantes. VAR Ricardo De Burgos Bengoechea. AVAR 1 Ignacio Iglesias Villanueva.
Tarjetas: amarilla para Vinicius(45′), Ceballos(46′), Jaume Costa(61′), Valverde(65′), Amath(71′), Modric(81′), Maffeo(86′), Ruiz de Galarreta(80′) y Raillo(92′).
Incidencias: Partido correspondiente a la vigésima jornada de LaLiga disputado en el estadio Son Moix ante 18.258 espectadores, la mejor entrada de la temporada. Presenció el partido Antonín Panenka, exfutbolista checoslovaco, autor de la manera de ejecutar un penalti que lleva su nombre
Comentario:
Trabajo colectivo en su máxima excelencia.
El Mallorca tumba al Real Madrid con un soberbio trabajo de equipo, en el que resulta difícil destacar a alguien sin exponerse a agraviar a otro, y sigue su racha en Son Moix contando los partidos por victorias, y van 4 de 4 desde el Atlético de Madrid el pasado 9 de noviembre. Conseguir que el equipo equipo merengue acabe el partido habiendo chutado una sola vez entre los tres palos, y que ésta sea de penalti, está a la altura de pocos equipos. Todo ello ante un equipo que no se podía relajar, por lo que tiene en juego, posible es que se haya dejado más de media Liga en Palma si el Barcelona suma de tres en su partido ante el Sevilla, ampliando su ventaja a 8 puntos.
En definitiva, destacados todos. Rajkovic ofreció una seguridad absoluta en sus dominios y detuvo un penalti a Marco Asensio, con gran estirada, negándole el empate a uno.
La defensa encomiable con un Pablo Maffeo en su mejor versión, será interesante ver el partido repetido y contar cuantos 1×1 le ganó a Vinicius robándole el balón sin falta y llevárselo controlado. Si los tres centrales, Gio, Raillo y Nastasic se mostraron inexpugnables, cabe resaltar el trabajo extra de Gio, prestando la cobertura a Maffeo en la lucha con Vinicius, sin dejar su marca, trabajo poco visible pero tremendamente eficaz. Todo ello con un Jaume Costa en su línea, que no es poco. Por delante de ellos, e incluso por momentos con ellos, Dani Rodríguez y Baba han demostrado haber recuperado su mejor nivel. Lo de Galarreta, una nueva lección de ayuda defensiva y marcar tiempos en el centro del campo e intentar lanzar a Kang-in Lee para conectar con Muriqi. Un pirata que sigue ganándose la admiración de la grada partido tras partido, independientemente de marcar o no, su trabajo es tan descomunal como efectivo.
El partido comenzó con un Mallorca con mucha intensidad y ritmo, tal como quería Aguirre y había comentado durante la semana, contrariado por la falta de ellos en Cádiz y Getafe. Fruto de ello llegó el primer gol a los 13 minutos, fue un centro de Dani Rodríguez desde la izquierda que, en el campo y en directo, pareció que remataba Muriqi en posición difícil y el balón describía una extraña parábola que vendía a Lunin, pero finalmente parece que fue Nacho el último en tocar y se anotó el autogol.
Hasta el descanso fue un querer y no poder del equipo blanco, que perdía todos los balones divididos ante el ímpetu de los rojillos y solo consiguió tiros lejanos tras las continuas faltas señaladas por el colegiado ante el mínimo contacto en cualquier disputa de balón. Paradójicamente, la primera tarjeta amarilla del partido fue para Vinicius por pisotón a Maffeo, fruto de su impotencia.
La segunda parte todo continuó igual, el Madrid ejerció un dominio más acentuado, visto desde la grada, pero el dominio empezaba y acababa donde quería el Mallorca. Los blancos tenían el dominio del balón, pero los rojillos el dominio del partido. A los 57 minutos pudo llegar el empate al señalar, el árbitro, un penalti cometido por Rajko sobre Vinicius, pero el propio Rajko enmendó su falta parando el penalti lanzado por Marco Asensio.
En el minuto 64 de partido entró Modric por Valverde. Pasados 2 minutos, Amath entra por Dani Rodríguez, en el Mallorca, que es despedido con una gran ovación. Todo sigue igual, Ancelotti se desespera en la banda y recurre a un triple cambio, a los 70 minutos, entran Mariano, Kroos y Alaba por Marco Asensio, Tchouameni y Ceballos. El Mallorca no se descompone en ningún momento y además dispone de dos contras que a punto estuvieron de conseguir el segundo gol. Antonio Sánchez y Battaglia sustituyen a Kang-in Lee y Baba. Aguirre consigue que el bloque no desfallezca y sigue controlando el partido dejando el balón a un Madrid desquiciado que no consigue hacer daño. Incluso Modric vio tarjeta por falta sobre su defensor Jaume Costa a los 80 minutos, un minuto antes la había visto Galarreta.
El dominio inoperante del Madrid se veía salpicado por sustos rojillos, a los 85 minutos la tuvo Jaume Costa en una contra, a pase de Amath. Un minuto antes había sido Antonio Sánchez quien había puesto a prueba a Lunin.
Transcurridos los 8 minutos de tiempo añadido, se llegó al final ante la explosión de alegría de la afición, que llenó Son Moix y animó durante todo el partido a sus jugadores.
El Mallorca suma 28 puntos, a 12 de los anhelados 40, por lo que suelen significar y el Madrid queda muy tocado en su lucha por el campeonato.
Toni Ferrer para Fútbol Balear.
Comenta esta noticia
Los comentarios están desactivados temporalmente. En breve estarán disponibles de nuevo.