Estaban mejor los visitantes que querían tener el balón y ser protagonistas en Santa Eulària y a los ocho minutos llegó la jugada que marcó el inicio del partido. El árbitro señaló un más que discutido penalti en el área peñista y Borja Calvo no falló desde los 11 metros para poner el 0-1 en el marcador. Tocaba remar.

El choque de estilos estaba servido. Mientras que el Mestalla buscaba combinar en corto y con velocidad, la Peña hacía un fútbol directo, abusando en exceso de un balón largo que no generaba ningún problema a la defensa valencianista. De hecho, cuando raseaban y jugaban más en corto, llegaban con más claridad al tercio final del campo.

La primera ocasión de cierto peligro de los locales llegó a las media hora de juego cuando Fraile se anticipó al portero en un balón en largo, pero, tras tocar el cuero y superar al guardameta, llegó muy forzado a un remate final que no encontró la portería.

Había crecido la Peña en el partido y cada vez pasaba menos apuros, se había adueñado del balón y se jugaba en el campo contrario. Además, la estrategia empezaba a ser una amenaza.

Así fue en el 42, cuando en un saque de esquina botado por Elorza fue prolongado por Marc Fuentes. La defensa valencianista no fue capaz a sacar el balón del área y llegó Madrigal para mandarlo al fondo de la red y poner las tablas. 1-1 y jugadores a vestuarios.

La segunda parte empezó con ritmo y tras dos aproximaciones de cierto peligro por parte peñista, Pereira estuvo providencial para bloquear un disparo de Martín Tejón que ya se relamía para hacer el segundo. Más allá de esta oportunidad, era la Peña la que seguía llevando el peso del partido y el paisaje era muy similar al del final del primer periodo.

Expulsión y sufrimiento
Pintaban bien las cosas para la Peña, pero en el 62 se torcieron. Mejía vio dos amarillas en un par de minutos y dejó a los ibicencos con 10. El Mestalla estuvo a punto de castigarlo acto seguido. Primero, Martín Tejón se encontró con un paradón de Edu Frías, y, después, Muñoz se topó con el palo. Vizuete recompuso su centro del campo dando entrada a Torices.

Empezó entonces un ejercicio de resistencia que parecía que se iba a hacer largo. El balón no le duraba nada a la Peña y el Valencia Mestalla lo movía con mucha velocidad, buscando el hueco y empezando a llegar al área con peligro. Parecía que era cuestión de tiempo que acertasen en una.

Los minutos iban cayendo y la Peña resistía. De hecho, el conjunto visitante cada vez tenía más problemas para generar peligro y el empate se veía mucho más cerca. Con el 1-1 se entró en el tiempo de descuento. Los de Vizuete supieron jugar muy bien estos minutos sin que pasasen demasiadas cosas. Incluso cada vez que robaban lograban forzar faltas que les daban la opción de enviar el balón al área.

En una de estas cuando apenas quedaba tiempo para más, llegó el gol. Tovar fue el más listo para aprovechar una prolongación y hacer el 2-1 que desataba la locura en el Municipal. Al Mestalla le quedó un balón al área, se rechazó. Final y la primera victoria del curso para los de Santa Eulària que siguen invictos.