Victoria del Mallorca en Son Moix ante el Granada que le permite alejarse a 8 puntos de distancia del Cádiz, equipo que marca la zona de descenso. El resultado de un gol a cero resulta del todo engañoso, pero la gran actuación del portero Batalla así lo quiso y poco faltó para que consiguiera el empate a cero goles.

La primera parte comenzó con un Granada que parecía querer el balón y dominar con posesiones largas, pero sus constantes imprecisiones, pases totalmente previsibles y falta de ritmo, no sólo no inquietaban al Mallorca, sino que lo acababan aburriendo y contagiando, con lo que asistimos a una primera parte sin problemas para los porteros y aburrida para el espectador, aun así, el público animaba con cánticos y se lo pasaba en grande. Pocas veces se ha sufrido tan poco como en esta primera parte ante un equipo, el Nazarí, que ya puede ir preparando la próxima temporada en segunda división, a raíz de los resultados conocidos hasta esta jornada y lo visto hoy en Son Moix, esto no lo arregla ni el regreso de Boabdil, ¨El Chico» para unos o el ¨El desdichado» para otros.

El que no estaba contento era Javier Aguirre, al que no le bastaba el hecho de no sufrir, quería más, quería los tres puntos y no desaprovechar la oportunidad que ofrecían los nazaríes de abrir el hueco de 8 puntos con la zona roja. En el descanso dejó a Copete fuera, pasando a defensa de cuatro y dio entrada a Morlanes, reforzando el centro del campo. El cambio de dibujo y la mayor intensidad ofrecida en la segunda parte por todo el equipo, acabó convirtiéndose en un ataque constante sobre el área visitante con continuas ocasiones de gol. Larin y Muriqi empezaron asociándose para acabar estorbándose en algunos momentos, por el ímpetu en la búsqueda del gol. En una de sus constantes llegadas Larin asistió a Muriqi, pero Batalla se lanzó a sus pies evitando el remate. El recital de Batalla no acabó aquí, también impidió un remate de Larin tras jugada de Dani. Para la última media hora, Aguirre dio entrada a Radonjic en sustitución de Antonio Sánchez, continuó el asedio mallorquinista sin que se moviera el marcador, aunque poco faltó en una nueva brillante intervención de Batalla al neutralizar un buen remate de Muriqi, unos minutos antes Abdón había sustituido a Larin. Por si no fuera suficiente el partidazo de Batalla, todavía tenía algo nuevo que ofrecer, pasó de realizar grandes paradas a una doble parada para enmarcar, primero rechaza un buen disparo de Radonjic con buena estirada, para acabar la jugada despejando a córner el rechace recogido por Raillo con otra estirada abajo. Sergi Darder y Jaume Costa se unieron al asedio sustituyendo a Dani Rodríguez y Toni Lato. A los 82 minutos el portero visitante despeja un gran remate de Raillo, éste se enrabietó y, un minuto más tarde, volvió a rematar de cabeza un córner botado por Darder, esta vez le puso la misma fuerza y rabia, pero mejor colocación y dio por finalizada la exhibición de Batalla. Tan cierto es que este portero había merecido mantener su puerta a cero, como que el Mallorca mereció golear al Granada.

La explosión de júbilo del público de Son Moix no fue menos espectacular, la unión de estos jugadores y su afición a llegado tiempos que ya quedan lejos.

No pudo haber mejor despedida entre equipo y afición de Son Moix ya que su próximo encuentro será en Sevilla, aunque el equipo tendrá que pasar antes por Mestalla.