Mateu Alemany dará un paso atrás y no formará parte del proyecto que encabeza Llorenç Serra Ferrer, aunque les prestará su apoyo incondicional si es que definitivamente presentan una oferta para comprar las acciones de Binipuntiró. Aunque prefieren la opción de Jaume Roures y Mediapro, los pesos pesados del actual Consejo de Administración ven con buenos ojos la aparición de empresarios mallorquines interesados en la adquisición del Mallorca, y les facilitarán el camino.

Tras haberse mantenido los primeros contactos en las últimas horas, Alemany trasladará a finales de semana una situación del actual estado financiero del Mallorca a Llorenç Serra Ferrer para que éste a su vez se lo remita a los empresarios con los que mantiene contacto, y que en principio estarían dispuestos a invertir entre 15 y 20 millones de euros, que se destinarían a efectuar una ampliación de capital, movimiento imprescindible para garantizar la liquidez del club a corto plazo. Parte de ese dinero iría para pagar las acciones de Binipuntiró, sobre las que Alemany posee una opción de compra que debe ejecutar antes del 30 de junio por valor de 1,5 millones de euros. El presidente las vendería por el mismo valor por el que las adquiera, sin plusvalía alguna.

La próxima semana puede ser decisiva en el proceso de venta del club. En principio está previsto que Roures dé su respuesta definitiva, y también se van a producir los primeros encuentros formales entre Alemany y los representantes del grupo que encabeza Llorenç Serra Ferrer.

Si el proyecto llega a buen puerto, el pobler sería la persona de mayor peso específico en el Mallorca, porque aunque los empresarios quieren nombrar un presidente, éste será sólo de rango institucional. Serra Ferrer será quien adopte todas las decisiones de rango trascendente, incluso las de índole económico, adoptando el cometido de manager general en toda su peculiaridad.

El proyecto, cuyos ideólogos aún no han revelado su identidad, se basará en una política de austeridad y contención de gastos. Los empresarios aportarían inicialmente entre 15 y 20 millones de euros, pero a partir de la próxima temporada el Mallorca debería subsistir en base a los recursos que fuera generando. Es decir, traspasos de jugadores. Sobre las altas, no habría fichajes millonarios, y la plantilla estaría formada por 14 ó 15 futbolistas profesionales y el resto serían del filial.

En cuanto al organigrama actual, es todavía muy pronto para anticipar decisiones estratégicas, pero hay que recordar que los dos principales responsables de la parcela deportiva, el entrenador Gregorio Manzano y el secretario técnico Nando Pons, tienen contrato en vigor, que en el caso del primero puede ser resuelto previo pago de medio millón de euros, siempre que se ejecute esta cláusula antes del 30 de junio. De todos modos, no está descartado que ambos continúen en el club.

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