David de Pablos aseguró ayer en el programa Ser Deportivos de Radio Ibiza que quiere demostrar en el Sant Rafel de Tercera, con el que ha fichado, que «es un buen jugador», ya que le quedó un mal sabor de boca durante su etapa en la UD Ibiza-Eivissa, en la temporada 2008-09, que culminó con el descenso de los de Vila desde la Segunda División B.

El futbolista consiguió ayer desvincularse definitivamente del Alicante, equipo con el que militaba en la categoría de bronce del fútbol nacional. Hoy tiene previsto llegar a la isla y por la tarde entrenarse con sus nuevos compañeros. De hecho, probablemente antes de la sesión de trabajo –sobre las 18.45 ó 19 horas– sea presentado en el campo municipal de Sant Rafel.

Sin embargo, el vicepresidente del club pitiuso, Bernat Bonet, se mostró ayer cauto porque aún podría torcerse la incorporación de De Pablos, aunque las posibilidades son mínimas. «Hay un 70 u 80% de opciones de que finalmente pase a nuestra plantilla, pero queda un 20% restante de que no», dijo.

Bonet explicó que el motivo está en que el jugador vasco pasaría de ser profesional a amateur, pero el plazo de fichajes de los primeros se cerró el pasado lunes: «Se tiene que presentar en la Federación Española de Fútbol un certificado de habilitación diciendo que desea pasar de profesional a jugador aficionado. Sin ese requisito no se puede tramitar una ficha aquí en Balears. Una vez que la Española tenga este documento y vea que está dado de baja en la Comunidad Valenciana, debe decidir, pero lo estaría haciendo con dos días fuera de plazo», declaró el vicepresidente del Sant Rafel.

El técnico del equipo se mostró feliz por la más que probable llegada de De Pablos y no descartó que pueda incluso jugar este próximo fin de semana frente al Alaior.

Diario de Ibiza