¿Cómo valorarías la temporada del CD.Calvià a falta de trece jornadas?

Mirando la clasificación lo primero que me viene a la cabeza es una valoración muy negativa, aunque el que haya visto los partido de los últimos domingos, creo que puedo decir que estamos teniendo demasiado castigo para todo el trabajo que estamos realizando.

Pero valorando la temporada desde el primer partido de liga hasta el del domingo pasado debo ser crítico y decir que no hemos estado a la altura de la categoría y que debemos asumir la culpa de lo mal que estamos dejando el nombre del C.D. Calvià.

¿Crees todavía que hay posibilidades para que el equipo se salve?

Mientras las matemáticas esten presentes, el Calvià es un equipo que luchará para salvarse. Eso que no quepa la menor duda. Seguiremos entrenando y saliendo al campo los domingos a conseguir los tres puntos.

¿Cómo esta viviendo el vestuario esta mala trayectoria?

El vestuario del Calvià es lo mejor que tenemos, somos un grupo de personas excepcionales. A pesar de la posición en la tabla la gente viene a los entrenos, está comprometido con la causa y salvemos el equipo o no, sacaré este aspecto positivo del equipo, el compañerismo que todos hemos demostrado a lo largo del año.

Gracias a ello la mala situación que estamos viviendo se lleva de un modo diferente que si se viese a los jugadores con ganas de acabar la temporada y no demostrando ser el equipo que somos.

¿Qué supondría para el CD.Calvià volver a vivir un descenso?

Supondría lo que es, descender, lamentarse por lo ocurrido y tras el verano formar una plantilla competitiva para luchar para devolver al Calvià a la regional preferente. Aunque también supondría perder algunos jugadores que no tengan en mente jugar una categoría inferior la próxima temporada.

¿Vez capaz al equipo de sacar algo positivo en un campo tan complicado como el del Serverense?

Por supuesto, creo que somos capaces de lo mejor y de lo peor, lo hemos demostrado a lo largo de la temporada, como ejemplo de los seis goles que nos endoso el Escolar en su campo o al contrario el empate en casa del líder. En definitiva, somos capaces de cualquier cosa. (Risas).

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