Alemany se despide de la afición en la web oficial del RCD Mallorca.

Cuando el pasado 15 de enero me puse por segunda vez al frente del RCD Mallorca, anuncié que el objetivo fundamental era salvar al club de una situación agónica en lo deportivo, y crítica también en el aspecto social, económico e institucional. Se abría un periodo breve pero muy intenso de transición hacia una nueva propiedad que asumiera la gestión del club más representativo de las islas.

No ha sido una etapa fácil. Las circunstancias eran adversas, y el tiempo del que disponíamos, escaso. Pero el trabajo, la dedicación, y una fe en este proyecto que nunca se perdió, nos ha permitido finalmente hacer realidad nuestros propósitos iniciales. En lo deportivo, dejamos al equipo en la máxima categoría, donde continua después de trece años de éxitos y al filial con el ansiado ascenso a Segunda B conseguido; en lo institucional, el Mallorca ha recuperado su credibilidad; y en el aspecto social, la afición ha vuelto a estar al lado de su equipo. A esta “paz social” que respira el entorno mallorquinista, se le debe añadir una ordenación de la deuda existente, que permitirá dar oxígeno financiero a la entidad durante los próximos años.

Han sido en definitiva siete meses de trabajo, que he tenido el honor de encabezar, pero que no hubiera sido posible sacar adelante sin la colaboración de muchísima personas. Ahora, en el momento en que dejo de nuevo la que siempre será mi casa, deseo agradecer a todos aquellos que me han acompañado en esta travesía. Gracias al Consejo de Administración y al Consejo Asesor por su dedicación siempre desinteresada y su implicación total; gracias a nuestros futbolistas y cuerpo técnico por haber sacado lo mejor de sí en el momento más delicado de los últimos años; gracias a todos los trabajadores del club por haber aportado también su profesionalidad cada uno de los días en que he estado al frente de la nave; y gracias a los medios de comunicación por haber creído en este proyecto, y por su apoyo en los momentos en que más los hemos necesitado.

Pero por encima de todo, mi agradecimiento final quiere ir dirigido a los aficionados del RCD Mallorca. A todos los socios y seguidores del club que nos dieron la oportunidad de reconducir una situación límite. Su respuesta para con el equipo fue sencillamente espectacular, y suyos fueron muchos de los puntos sumados. Gracias una vez más a todos y cada uno de vosotros.

Hoy, siete meses después, y fiel a lo que dije en su día, entrego el relevo a un nuevo equipo gestor, que aterriza en nuestro club cargado de ilusión y dispuesto a mantener al Mallorca en la élite del fútbol español durante mucho más tiempo. Sólo me queda desearles suerte en esta etapa, y confiar en que todas las decisiones que tomen sirvan para hacer un poco más grande a nuestro club. En mí encontrarán siempre a un colaborador y, cómo no, a un gran aficionado.

Mateu Alemany