Alineaciones:

FC. Barcelona B: Ruben, Sobregrau, Espasandin, Bartre, Muniesa, Romeu(Rueda), Rochina(Benja), Do Santos, Jonathan Soriano(Elvis), Tiago y Edu Oriol.

RCD. Mallorca B: Nauset, Xino, Kevin, Truyols, Paco Vazquez, Alberto, Ruben(Jaime), Pina, Sergi, Xisco(Castellano) y Marti(Didac).

Goles: 1-0 min.1 Jonathan Soriano, 1-1 min. 62 Sergi Enrich.

Colegiado: Ignacio Hermosilla ayudado por Carlos y Diego del colegio de la Rioja, correcta actuación.

Tarjetas: Amarillas a Sobregrau por el Barça B y a Nauset y Ximo, por el Mallorca.

Comentario:

Buen partido y excelente imagen ofreció el conjunto mallorquinista en su visita al “mini estadi” donde consiguió un valioso y meritorio empate. El equipo que dirige Jaume Bauçà presentó buenos argumentos futbolísticos que le pudieron dar la victoria.

Tanto en el inicio del encuentro como en el inicio de la segunda mitad el conjunto balear salió al terreno de juego con poca concentración. En el primer minuto de juego, Jonathan Soriano marcó el primer gol del partido aprovechando un regalo del portero visitante, Nauzet, que con un defectuoso despeje dejó en bandeja el balón al ariete barcelonista para que adelantara con una vaselina precisa a los azulgranas. Al iniciarse la segunda parte, Jonathan pudo hacer subir el segundo gol en el marcador y decantar el partido para el filial barcelonista, pero su gran remate con la pierna izquierda se estrelló contra el palo.

Exceptuando este aspecto, que fue la nota más negativa del equipo bermellón, el juego desplegado por los futbolistas del filial fue de menos a más, con un gran trabajo colectivo y con una excelente organización táctica se hicieron merecedores de los tres puntos. Cabe destacar la presión sobre la salida del balón de la zaga azulgrana acosando a los dos centrales –Bartra y Muniesa–, al medio centro Oriol Romeu y a los interiores –Jonathan Dos Santos y Thiago– que fue un aspecto importante para anular la construcción del juego ofensivo del filial barcelonista.

La estrategia en los lanzamientos de los saques de esquina estuvieron a punto de inclinar la balanza para los bermellones. En los primeros diez minutos de la primera parte, Paco Vázquez avisó por partida doble con dos grandes remates de cabeza que estuvieron a punto de empatar el encuentro y, en las postrimerías del partido, Rubén Miño y la zaga local evitaron que el equipo visitante se llevara la victoria.

Las variantes tácticas que presentó el técnico visitante a partir del minuto quince de la segunda mitad fueron determinantes en el empate del conjunto balear. Los cambios que introdujo Jaume Bauçà –dando entrada a Jaime y a Dani Castellano en las bandas y posicionando a Martí por dentro y por detrás de Sergi– dieron más profundidad al juego ofensivo del equipo. Sin duda, fue la clave para igualar el marcador: primero, porque dio más frescura al juego exterior; segundo, porque Martí dio más calidad en el juego entre líneas y en la llegada a la zona de finalización dando una mayor profundidad al equipo; y, tercero, porque el posicionamiento de Martí hizo despertar a Sergi que se mostró brillante durante los últimos treinta minutos del encuentro.

El juego exterior por las bandas a partir de los cambios fue muy desequilibrante. En el minuto 62, una excelente combinación colectiva por banda izquierda entre Dani Castellano, Martí y Sergi permitió al ariete igualar el partido. Una jugada preciosa, rápida y de gran calidad, destacando tanto el gran pase de Martí de primera como el gran movimiento de desmarque de Sergi que sólo tuvo que llegar en el momento justo a la zona de finalización para alojar el balón dentro de la portería defendida por Rubén Miño. Un empate merecido que dio mucha confianza a los jugadores mallorquinistas que se hicieron con el control y el dominio del juego. En el minuto 78 otra gran jugada combinativa por banda derecha permitió a Jaime profundizar y con una excelente visión de juego asistió con un pase magistral al espacio para Martí. El media punta remató de primera evitando la intervención del guardameta barcelonista, pero el palo impidió que el Mallorca B se pusiera por delante en el marcador.

El equipo balear demostró que cuenta con grandes jugadores canteranos de un gran potencial y que podrían ayudar al primer equipo con las aportaciones de Paco Vázquez, Martí, Sergi o Pina.

El debut azulgrana en el mini fue decepcionante (como en la primera jornada de liga) y son muchos aspectos los que tendrá que corregir el técnico Luis Enrique con sus jugadores para mejorar la imagen del equipo. El juego barcelonista no tuvo variantes ofensivas en la salida de balón para contrarrestar la propuesta de presión del conjunto mallorquín. Por otra parte, el equipo cuenta con demasiados jugadores con perfil de 9 que están jugando como extremos sin la adaptación necesaria a ese puesto, hecho que limita la creatividad del juego ofensivo. Los cambios que introdujo el técnico barcelonista durante la segunda mitad aportaron bien poco a la dinámica del partido y únicamente podemos destacar la acción individual realizada por Elvis que estuvo a punto de marcar.

Toni Cortés corresponsal en Barcelona de Fútbol Balear.