A la vista de la polémica suscitada y de los comentarios que en los foros de opinión se han expresado, está claro que no interesa a nadie, ni a políticos, ni a clubs, ni tan siquiera a la afición. Estas reacciones y comentarios, están ahí y por mucho que lo disimulemos es el sentimiento de la gente que lo ha querido expresar, y que espero haya servido para que se den cuenta que no son formas, y que mientras sigamos actuando así,  en Ibiza no podremos avanzar en fútbol.

Para los que pensaron que tenía alguna especial manía a un club como el CF. Rápid,  se equivocan, creo que soy el menos sospechoso de eso, mis comienzos futbolísticos fueron con ese club, de la mano de históricos del Rapid como Juanito Guillém, Serafín Grivé, Pedro Roselló y en una segunda etapa convirtiéndome en el entrenador del primer equipo juvenil del Rapid, durante varias temporadas,  hasta que tuve que dejarlo por motivos laborales.  Grandísimos recuerdos que les tengo un gran cariño, prueba de ello es el trofeo de la foto, que todavía tengo expuesto en mi casa, que me dieron como jugador, en una época que este tipo de detalles, no se hacían porque no había presupuesto ni para agua caliente. Ahora el club tiene directiva nueva, sinceramente no los conozco más allá del saludo, en sus filas hay excompañeros de equipos e incluso,  en el equipo regional, jugadores veteranos a los que he entrenado, a los que si conozco, y les deseo lo mejor, y estoy seguro que ellos a mi.

Dicho esto, que defienda que hay que apoyar al equipo de mayor categoría de Vila o de Ibiza, no le debería extrañar a nadie, porque no persigo que sólo se haga con el Isleño, del que en estos momentos soy entrenador y directivo, sino que, llegado el momento cualquier equipo que consiga serlo, se le apoye de igual manera,  y no nos convirtamos en cuatro clubs extraños, que lo único que nos interesa es poner la zancadilla al club de al lado. Muy pocos son los jugadores que sólo han militado en un club, la mayoría pasa por varios.  Jugadores, padres y directivos no tenemos porque sentirnos violentos, al cruzarnos en el mismo campo, donde estamos “condenados” a entrenar.  Nos necesitamos, si nos quejamos de que en Mallorca, saben competir porque tienen ligas más largas y muchos más clubs, en Ibiza ¿que queremos? un único club sin competición, no interesa a nadie. Que haya muchos clubs, que se pueda competir y que llegado el momento si uno consigue metas más altas, desde los otros clubs se le apoye, al fin y al cabo, si ha hecho las cosas bien,  podrá tener el orgullo de que militen en ese equipo jugadores formados en el suyo, y quizá en un futuro, volverlos a aprovechar. La rivalidad sólo debería ceñirse al momento de la disputa del partido, lógicamente cada uno querrá que gane el suyo, pero hasta ahí.

También he ido más allá, reclamando desde las instituciones para este club el apoyo necesario para poder mantenerse, que el CF. Rapid la temporada pasada no hizo las cosas bien, no lo digo yo, lo dijo su propio presidente, en declaraciones al Diario de Ibiza, entre otras cosas, cambiar los colores del Rapid, por los de la SD Ibiza, para aprovecharse del “vacío” existente. Pero cometer errores, no es una condena a muerte o cadena perpetua, uno rectifica y vuelve a empezar.  Esta temporada han vuelto a cambiarle el nombre y el equipaje, el Isleño también cometió errores, y volvió a empezar y ya está. Eso sí, de alguna manera esos errores se pagan, en su momento se fueron equipos del Isleño y ahora lo han hecho en el Rápid, por tal motivo reclamo a las instituciones,  que los clubs que mejor gestionen a sus equipos sean los más favorecidos por éstas, porque es la única manera de crecer. Uno, dos o tres jugadores pueden cambiar de equipo por las circunstancias que sean, no están contentos con el entrenador, o tienen amigos en otro club, pero cuando todo un equipo, o varios,  liderado por todos los padres están de acuerdo en cambiar a otro club, es porque algo se ha hecho mal. Si se marchan, a algún club irán a parar, y éste, no es el culpable al recibirlos.

A las instituciones precisamente no se les ayuda, todos vamos a estirar la cuerda a ver hasta donde llega, cuando lo razonable sería sentarse y negociar con todas las partes un mejor aprovechamiento de las instalaciones, para que todos tuvieran su espacio, en las horas y campos que necesitara. Al igual que el resto de instalaciones, bar incluido, eso de “si es del Isleño o del Rapid yo no voy” ¿Por qué? En Can Misses 2 o en Can Cantó no lo hacemos porque es “neutral”. Si fuéramos un poco más listos aprovecharíamos las instalaciones para agrupar el mayor número de equipos posible entrenado en unas franjas horarias, tanto de un club, como de otro, para rentabilizar los bares, siendo respetuosos con todos, así la gente consumiría más, y más a gusto,  en el que en ese momento le tocara estar abierto, sea el que fuere.

Me consta que desde el Ayuntamiento se está trabajando para intentar, contentar a todas las partes, me temo que va a ser imposible, pero creo que todos deberíamos tener sentido común y lo que consideramos que querríamos para nuestro club en las circunstancias del otro, aceptarlas.

Desde luego que se debe proteger el fútbol base, ya que es la despensa del fútbol profesional, pero no olvidarnos que ese fútbol base necesita tener un equipo o los que sean, que puedan ser una meta alcanzable. Cuanto mayor nivel futbolístico haya, más gente a futbol base se apuntará, por lo tanto las Instituciones deberían cuidar, y apoyar,  para que tengamos por lo menos un club lo más arriba posible, dando preferencia a sus necesidades, “reales” para facilitar su trabajo y que no sea por falta apoyo institucional o de la afición, que no esté donde se merezca estar. Que sea únicamente por méritos deportivos, que al fin y al cabo éste se tiene que nutrir de la cantera de todos los equipos de la Isla y que llegado el momento y si continuo en la directiva pueden estar seguros que tendrán mi apoyo, si es otro,  el equipo que lo necesita.

Vicent Ferrer