El presidente del Sporting aplaude la actitud de la plantilla y desvela que ya existen deudas.

Lleva un buen puñado de semanas en silencio, en un segundo plano. No ha querido situarse debajo de los focos ni cuando ha aflorado un nuevo conflicto con el Ajuntament de Maó. Pero con el Sporting en plena carrera y las administraciones metiendo el bisturí en los presupuestos, Paco Segarra ha aparecido para redactar un discurso con dos mensajes: agradecer el esfuerzo de la plantilla y advertir que empiezan los problemas para pagar: «Teniendo en cuenta el retraso que llevamos en los pagos, estoy encantado con el rendimiento del equipo», dijo ayer el presidente.

Apenas se han consumido seis jornadas de liga, pero el Sporting Mahonés ya atraviesa problemas financieros. Las deudas y la indefinición de las administraciones también han arrastrado al club de Maó, que adeuda parte de una mensualidad a la plantilla. «Quiero agradecer públicamente el voto de confianza que nos han dado los jugadores, porque no han dejado de trabajar y de luchar hasta el último momento de cada partido», subraya el dirigente catalán.

Segarra tiene varias citas con las instituciones en los próximos días con un único objetivo: desbloquear una situación que ha generado un cortocircuito en la economía de la entidad. Sin ir más lejos, el Sporting Mahonés está pendiente de percibir el variable de la subvención de la Fundació Illesport del ejercicio 2010/11. Pese a todo, el equipo de Elcacho ha sumado nueve puntos y lleva una trayectoria imponente: «No es fácil trabajar cuando ves que de entrada el club te empieza a fallar, por lo que estoy encantado con la trayectoria que llevamos. Pese a los problemas, el compromiso de los futbolistas es enorme. No han bajado la guardia y eso es importante, porque sabemos que el futuro económico del club depende de que seamos competitivos».

El presidente del Sporting considera que de este tipo de situaciones «nadie sale ganando», pero también advierte que la época en la que Paco Segarra llegaba con el dinero y solucionaba los problemas ha pasado: «Yo no tengo la solución, no siempre puede salir un Peter Pan y pagarlo todo. Hemos visto que todos los clubes de Menorca están igual, por lo que es evidente que esto no puede seguir así».

El Sporting Mahonés ya tuvo problemas para abonar las nóminas la pasada temporada, algo que casi le cuesta el descenso administrativo a Tercera División. A pesar de que ha rebajado de forma considerable el presupuesto, la falta de noticias del Govern balear, el Consell de Menorca y el Ajuntament de Maó sobre las cantidades que aportarán este curso le han generado al club un problema enorme: «La incógnita que supone a día de hoy la participación institucional nos crea mucha incertidumbre», exponen desde el Sporting Mahonés.

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