El presidente del Fisiomedia Manacor, Miquel Jaume, reconoce los problemas económicos del club causados por la deuda institucional que arrastra del año pasado. Pese a la delicada situación, los dirigentes esperan encontrar una solución para poder pagar las nóminas al cuerpo técnico y jugadores. De no ser así, los futbolistas obtendrán la carta de libertad a finales de diciembre.

La deuda que arrastra el Fisiomedia Manacor por el impago de los convenios firmados con diferentes instituciones, ha obligado al club ha lanzar una llamada de socorro. A día de hoy, el Fisiomedia todavía no ha cobrado la subvención que le otorgó el Gobierno Balear, entre otras entidades, correspondiente a la temporada pasada y eso ha complicado demasiado su situación económica. Tanto, que los jugadores y cuerpo técnico, todavía no han podido cobrar sus nóminas. En este sentido, Miquel Jaume reconoce que “nosotros teníamos hecha una planificación desde hace tres años, reduciendo el presupuesto entorno a un treinta por ciento anual y así lo hemos venido haciendo, pero nunca nos habríamos pensado que en el mes de mayo cuando pagamos 80.000 euros en metálico de la inscripción, se llegaría a esta situación”. Además, Jaume añade que “el treinta y siete por ciento del presupuesto está supeditado a las subvenciones públicas. Si hubiéramos sabido que el futuro era éste hubiéramos renunciado, no habríamos pagado la inscripción y hubiéramos jugado en Segunda. No tendríamos estos problemas. Nos embarcamos porque nos creímos lo que nos plantearon desde las instituciones, nunca nos habríamos pensado que no nos pagarían ni un euro en diez meses”.

Poco a poco, el Fisiomedia Manacor ha ido adaptando su presupuesto a la complicada coyuntura económica actual. Por eso, el presidente, Miquel Jaume, apunta que “nosotros debemos ser el club que tiene menos dependencia del dinero público. Estábamos en la línea correcta y, de hecho, lo que debemos es esto. Si se cumpliese todo lo que hay firmado no tendríamos ningún problema porque los patrocinadores privados han puesto todo lo que debían, incluso, más de lo esperado”.

Pese a la complicada situación por la que atraviesa el club, los jugadores y miembros del staff técnico, han mostrado un comportamiento ejemplar. Por eso, Miquel Jaume no duda en “agradecer la postura de los jugadores y del cuerpo técnico que son muy profesionales y que están identificados con el proyecto y que saben que hacemos todo lo posible por salir de este problema. Venimos pasando por diferentes problemas: pabellón, problemas para entrenar… Si se nos hubiera dicho que no nos pagarían nos habríamos planteado otra cosa”.

Los componentes del primer equipo dieron a conocer, hace tan solo un día, su delicada situación mediante una carta abierta. Y es que, de momento, el club no les ha podido abonar las nóminas de este año y en algunos casos concretos, todavía se les tiene que abonar pagos de la temporada anterior. En este sentido, el presidente del Fisiomedia Manacor insiste en que “hay que ser coherentes. Los jugadores son trabajadores y tienen derecho a cobrar y a mantener dignamente a sus familias. Si una empresa no les paga, los trabajadores tienen derecho a marcharse y seguir su camino en otro sitio. Por eso, hemos decidió que “si a 31 de diciembre no se ha resuelto la situación, el que quiera salir, saldrá. Hay que ser realistas, pero también hay que cumplir con las cosas que se firman”.

Ya son muchos, quizá demasiados, los contratiempos que ha tenido que superar el Fisiomedia Manacor para poder asentarse en la mejor liga de fútbol sala del mundo. Sin pabellón para poder jugar en su ciudad, sin pista para poder entrenar con dignidad, ahora el club, intenta seguir adelante pese a la deuda institucional que arrastras. Para Miquel Jaume “la verdad es que nos está pasando de todo y es injusto. Somos el único club que no juega en su ciudad, problemas para entrenar con normalidad, entrenamos en una pista y jugamos en otra diferente… Todo esto nos ha provocado un importante daño también económico que hemos venido arrastrando y que hemos intentado subsanar con el tiempo, pero claro, todo esfuerzo se paga en tiempo de crisis. A pesar de todo, los patrocinadores han respondido y lo que ha fallado es el dinero que nos habían prometido desde las instituciones”.

En cualquier caso, el Fisiomedia Manacor todavía tiene un pequeño margen de maniobra que intentará aprovechar para poder superar esta delicada situación. El presidente del club añade que “hay que dar este plazo porque pueden pasar muchas cosas, pero la situación es muy complicada. Los jugadores tienen que comer y hay que entenderlo. Hacemos todo lo posible para dar la vuelta a la situación, pero necesitamos que se cumpla con nosotros. No hacemos planes de futuro porque en la situación de hoy en día las cosas cambian en plazos muy cortos”. Y es que, de una situación límite como la que padece el Fisiomedia Manacor también se pueden extraer algunas conclusiones positivas. Por eso Miquel Jaume concluye que “los jugadores están muy comprometidos, trabajan cada día con la cantera, los veo muy bien, el tema deportivo no tiene nada que ver con este tema, no han dejado de trabajar y solo hay que verlos entrenar para saber que lo están dando todo, lo que es de agradecer”.

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