Alineaciones:
Formentera: Marcos Contreras, Carlos Rodriguez, Oscar Mayans, Philgence E. Manthan, Marcos Torres, Michael Romero, Sergi Arimany, Jose Carlos Moreno, Mourad Esbiba, Diego Adrian Romero y Sergi Moreno.
Sustituciones: Damian D. Coronel, Winde Samb, Jordi Verdera, Christian J Mancebo y Vicente Ferrer
Collerense: Ruben Blas, Alejandro Diaz, Jose M Sanchez, Juan De Dios Garcia Martinez, Daniel Ramirez, Antonio J Blazquez, Roberto Mateo, Francisco J Garcia, Alejandro Muñoz, Daniel Lozano y Sergio Arjona.
Sustituciones: Sergio Nieto, Raul Salcedo, Antonio Cortes, Roberto Navarro y Marc Mestre
Goles: 0-1 Alejandro Muñoz (min 4)
Árbitro: Juan Jose Ferrer Perello. asistido por Juan Dominguez Mayol y Jose Luis Fernandez Cardona.
Comentario:
El viento se lleva los puntos
Un despiste defensivo sirvió al Collerense para crear su única pero definitiva ocasión de gol El fuerte poniente obligó al Formentera a jugar un tipo de partido que no le es cómodo Los de Elcacho, con las bajas de Adri y Titi, generaron oportunidades sin estar atinados en el remate.
Josep Rubio/Formentera
Los más veteranos de la grada local esperaban que el encuentro de ayer serviría para remendar la herida que le abrió el Collerense hace 33 años al Formentera, cuando los pitiusos encajaron un un rosco (6-0) en Coll d’en Rabassa. La espina seguirá clavada por lo menos un año más, pero del sacrificio y entereza demostrado ayer por los jugadores de Luis Elcacho se desprende por lo menos que la herida no amenaza en infectarse. Y así lo entendió la hinchada roja y negra, que ayer abandonó el Municipal explicándose la derrota en el primer partido del 2013 con un paralelismo con aquel tropiezo contra el Campos en la primera jornada de liga, tras la que llegaría una formidable primera vuelta.
Si bien el fuerte viento perjudicó a los mallorquines en su movida travesía por los Freus, ya sobre el verde del césped esta circunstancia pareció incomodarles menos que a los jugadores del Formentera, que juegan su futbol a través de un control y unas triangulaciones que ayer eran casi una utopía de llevar a cabo. La apuesta del equipo entrenado por Miguel Ángel Espadas pasaba por hacer poca cosa pero muy bien hecha. El decimoquinto clasificado saltó al campo del segundo sin complejos: a asentar su defensa y a marcarse algún farol a la contra, ni que fuese para guardar las apariencias y evitar que el rival se envalentonase enviando demasiada carga ofensiva. A este plantemiento le llegó como anillo al dedo el regalo de la defensa local al delantero Espadas, que vio como le servían en bandeja un balón que le dejaba solo ante Marcos Contreras que, vendido, no pudo evitar el 0 a 1.
El Formentera contó durante el primer tiempo con Arimany como referencia atacante, sin embargo las opciones que llegaban al catalán le obligaban a disparar muy forzado, ya sea por las trayectorias impredecibles de las pelotas altas zarandeadas por el viento o bien por la eficaz tenaza defensiva que tejió el Collerense. En la reanudación Elcacho sentó al de Olot y dio paso a Winde, una alternativa que podía ayudar a ganar la espalda de la zaga contraria ya no con balones altos sino con pases en profundidad que confluyesen con la velocidad de los delanteros. Los mediocampistas pitiusos lograron servir algunos balones en que dejaron solos a los delanteros, sin embargo tanto Winde como el resto de sus compañeros cayeron una y otra vez en posición antirreglamentaria, unas decisiones que algunas veces fueron francamente dudosas y siempre fuertemente protestadas por el público del Municipal.
Pasados los dos tercios de partido el míster del Formentera sustituyó al capitán, Diego Romero, que se resintió de una molestia, por el juvenil Cristian Mancebo. El formenterés apuntó maneras y desparpajo pero se apuntó a la mala fortuna de sus compañeros al cabecear fuera un corner que media grada ya daba por gol. Con la derrota el Formentera sigue segundo en la tabla y espera verse las caras con el Montuiri, de la parte media de la tabla.
Elcacho: «Hemos pecado de angustia»
El entrenador local, Luis Elcacho ha subrayado que encajar un gol en contra en el minuto 4 de juego ha sido determinante: «Casi se lo hemos regalado, ellos se lo han encontrado sin querer y les ha facilitado el trabajo» y ha añadido que «el viento ha provocado que el equipo sufriese mucho». Además de estos factores el catalán también recalcó: «No hemos sido capaces de transformar las oportunidades, nos hemos precipatado».
Por otro lado, el preparador visitante, Miguel Ángel Espadas, apuntó las claves de la victoria mallorquina: «Saber aguantar el arreón inicial del Formentera y hacer nuestro partido, estando bien atrás y jugar con intensidad». j.r. formentera
Josep Rubio para Fútbol Balear.
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