Chichi Soler, director deportivo de Inverfútbol, la empresa de Bartolomé Cursach que nutre de futbolistas al Atlético Baleares, tomará por segunda vez las riendas del equipo a petición personal del propio Cursach, que le ha pedido que se siente en el banquillo hasta final de temporada, fecha en la que teóricamente Inverfútbol debe dar por finalizada de manera definitiva su relación con el club blanquiazul.

Chichi Soler ya entrenó a la primera plantilla hace tres temporadas sustituyendo al centrocampista internacional Francisco, cuya etapa en el banquillo baleárico fue muy efímera. Soler ha sido el responsable de la confección de la actual plantilla a excepción de dos o tres futbolistas, lo que le convierte en la persona indicada porque es el mejor conocedor del vestuario.

Soler tendrá de segundo a Angel Layos, un hombre de la casa que ya estuvo de ayudante de Gustavo Siviero, mientras que como preparador físico se mantendrá Pau Albertí, que llegó el pasado verano de la mano de Sansó.

Paco Soler ya dirigirá la sesión de entrenamiento de esta mañana después de que Sansó se despida de los jugadores, preparando el partido del próximo domingo en el estadio de Los Arcos ante el Orihuela, equipo que en la pasada jornada perdió ante el Mallorca B y que es el que marca el corte de la promoción. Está dirigido por un exmallorquinista como es Benigno Lema, y su objetivo es por supuesto la permanenc ia en Segunda División B.

Chichi Soler ha sido también el responsable de los fichajes en las últimas temporadas, y aunque en este curso es evidente que los resultados no han sido buenos, el año pasado consiguió que el Atlético Baleares fuera campeón de su grupo de Segunda División B por primera vez en su historia, quedando a un paso del ascenso en la triste e inolvidable eliminatoria ante el Mirandés.

También ha sido el descubridor de futbolistas de la categoría del inrernacional nigeriano Lawal, al que trajo todavía en edad juvenil, Peter, Edet, o Femi Su buena relación con Walter Pandiani, con el que coincidió en el Mallorca en la temporada 2002-03, fue decisiva para que el uruguayo recalara en la isla, convirtiéndose en el mayor reclamo mediático de la historia del Atlético Baleares.

A Soler no se le exigirá el ascenso porque la distancia es casi insalvable, pero en el club se confía en que haga reaccionar al equipo y empiece cuanto antes a remontar posiciones.

Pedro Bonet para Fútbol Balear