Joan Juanico.

Se acabó. Siete años después de la llegada al Real Mallorca el delantero menorquín Sergi Enrich (Ciutadella, 23 años), tal y como avanzó en exclusiva Ultima Hora Menorca en su edición del pasado 27 de junio, no seguirá en la entidad del Iberostar Estadi.

Enrich rescindió ayer por la mañana su contrato con el Mallorca y de esta manera queda libre para fichar con quien desee tras haber estado dos años cedido en la Segunda División A; primero en el Recreativo de Huelva y esta temporada en la AD Alcorcón. Enrich, al que todavía le restaban dos años de contrato en el Mallorca, vio como ayer se terminaba su particular culebrón con el equipo palmesano, club con el que llegó a debutar en la Primera División hace cuatro temporadas a las órdenes de Gregorio Manzano. Un final para el jugador ciutadellenc un tanto amargo.

El delantero, que veía como desde hacía dos años ya no contaban con él en el Iberostar Estadi, recibió entre sorpresas una primera llamada ayer por la mañana; era el nuevo entrenador del Mallorca, José Luis Oltra. «Me pareció muy extraño pero sí; primero fue el entrenador del Mallorca quien me llamó. Y una hora más tarde fue el director deportivo, Serra Ferrer, quien se puso en contacto conmigo», explicaba contrariado. «Oltra me admitió que era de su agrado y que le habían hablado muy bien de mí, sobre todo Álvaro Cervera, mi entrenador en el Recreativo. También mi representante, que se conocen de hace años», explicaba confuso Enrich. Por tanto, pese a no decirlo explícitamente, Enrich tiene claro que la decisión de no contar con él ya de cara al futuro proyecto de retorno a la Primera División viene de la dirección deportiva.

«Serra Ferrer nunca ha dado la cara por mí. Hace unos años que ya veo que el Mallorca no es de Sergi Enrich, que ha cambiado mucho de cuando sí confiaban en mí. Por ello ya puse esta cláusula, porque notaba que no contaban conmigo», señala el jugador. Señalando más directamente a Serra Ferrer, Enrich opinaba que «con su llegada, a excepción del primer año con Michael Laudrup en el que ya era fijo en la primera plantilla, luego empecé a ver cosas raras. Jugué incluso con el danés de técnico partidos en Primera y de golpe desaparecí del mapa», concluía ayer Enrich un tanto abatido aunque ilusionado ante sus posibles nuevas salidas.

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