Roberto Soldado, delantero del Valencia y de la selección española, recarga pilas en Ibiza tras concluir la Copa Federaciones, donde La Roja perdió la final frente a Brasil. El atacante es un apasionado de la isla y no ha dudado en desconectar de la exigente temporada entre nosotros, como viene siendo habitual verano tras verano.

El futbolista está de actualidad porque el Tottenham inglés se ha fijado en él para apuntalar su línea de ataque. Al parecer, el club británico, que ya intentó su fichaje el curso pasado, estaría dispuesto a pagar al Valencia 20 millones de euros, pero los responsables valencianistas no van a dejar marchar a su goleador por menos de 30, que es lo que cuesta su libertad.

La voluntad del jugador siempre ha ido ligada a cumplir su compromiso con el Valencia, que le une desde el verano pasado hasta 2017. Sin embargo, la posibilidad de disputar la Champions la próxima temporada puede ser uno de los aspectos que le seduzcan a cambiar de aires. En la imagen que acompaña este artículo, Soldado posa junto a Víctor Álvarez, jugador juvenil del Portmany, en Cala Bassa este mediodía.

 

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