Davide Cillo no regresará a la disciplina del club el siete de enero, fecha fijada para reanudar los entrenamientos después del parón navideño. El lateral izquierdo no se esconde y es el primer futbolista del equipo en hacer pública su decisión.
El defensa se encuentra en Roma disfrutando de las vacaciones de Navidad con su familia y amigos y desde Italia asegura que sin dinero no juega. “No voy a jugar gratis. No vuelvo al Ibiza porque Stinà me ha mentido en las fechas de los pagos y no me va a engañar más”, apunta el futbolista.
Cillo no es el único jugador del Ibiza que afirma no volver a la isla. Otros compañeros harán lo mismo, pero han preferido permanecer en el anonimato. De momento.
El defensor italiano, que no cuenta con la pertinente baja, está buscando equipo en su país para no perder lo que resta de temporada.
En una entrevista que concedió a FPI hace varias semanas (El Samurai del Ibiza se llama Cillo), el defensor transalpino relataba que creía en el proyecto y que se iba a dejar el alma en el terreno de juego para llevar a buen puerto al equipo, pero su paciencia se ha agotado. La banda izquierda de Can Misses no volverá a contar con su presencia. Se marcha un excepcional lateral, un jugador que lo dio todo por el club que no ha cumplido con él.
El club recibe una nueva denuncia
Al Ibiza le crecen los enanos. Por si no fueran pocas las problemáticas en las que está inmersa la entidad, ahora se enfrenta a una nueva denuncia. El propietario del piso donde han residido Cillo, Ventimiglia y Censi ha interpuesto una demanda al club por el impago del alquiler, importe que podría ascender a unos 2000 euros.
Juanjo Fernández de Oviedo
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