Los seis jugadores que están en la isla no volverán a ejercitarse hasta el lunes a la espera de que el vicepresidente ejecutivo llegue con el dinero para abonarles las cuatro mensualidades pendientes. El dirigente promete que liquidará todo.
GUSTAVO L. SIRVENT Los seis jugadores de la plantilla del Eivissa que están en la isla (tres juveniles y tres profesionales) han decidido dejar de entrenar hasta que el vicepresidente ejecutivo del club, Antonio Stinà, aparezca en las Pitiüses y pague lo que les debe.
El motivo es el reiterado incumplimiento de palabra del directivo italiano, que continúa prometiendo que abonará los cuatro meses que adeuda a los futbolistas, pero su voluntad sólo se queda en eso, ya que los pagos no se consuman.
Los jugadores dirigidos por Onofrio Barone acudieron ayer al estadio de Can Misses para ejercitarse, pero decidieron no hacerlo cansados de esperar alguna noticia del dirigente transalpino. Posteriormente, hablaron entre ellos y acordaron no volver a entrenar hasta que el máximo responsable de la UD Ibiza Eivissa se persone en el campo y liquide sus compromisos con los futbolistas.
Nueva promesa de Stinà
Según ha podido saber esta redacción, Antonio Stinà aterrizará en el aeropuerto de es Codolar el próximo lunes. La intención del mandatario es la de pagar las mensualidades que se deben a la plantilla y cuerpo técnico, así como la de los ex entrenadores del club, Sergio Tortosa y Dani Ferrer. Aún así, los informantes son muy recelosos de que el vicepresidente llegue con dinero fresco para pagar, ya que los antecedentes le delatan.
El asunto del desembolso de dinero no es el único tema que preocupa a los profesionales, puesto que saben que mañana domingo llegarán a la isla nuevos jugadores. Algunas fuentes apuntan que serán unos diez los que se presenten en el entrenamiento del lunes. Los actuales futbolistas no entienden cómo pueden llegar refuerzos si no hay dinero para abonar lo que les adeudan desde hace cuatro meses. Aparte, se da la paradoja de que mientras el Ibiza no reintegre a la Federación Balear los 20.000 euros que debe a los ex entrenadores Sergio Tortosa y Dani Ferrer, no podrá tramitar ninguna ficha, por lo que la puerta a cualquier tipo de fichaje está cerrada en caso de no pagar, como ya ha sucedido en anteriores ocasiones que ha querido fichar.
DIARIO DE IBIZA
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