“Hable con Miguel Angel, me comento la posibilidad de volver e inmediatamente empiezas a pensar que es lo que tienes que hacer, la charla que tienes que dar a los jugadores, las carencias que tiene el equipo que han provocado que los resultados estén por debajo de las expectativas creadas al inicio de la temporada. A partir de aquí básicamente mi charla con los jugadores ha ido encaminada a convencerles de que ahora no es momento de dudar, ni de lamentarse. A llegado la hora de creer en sí mismos, porque son buenos jugadores y a creer en el compañero”.
“Es importante, a la hora de entrenar, que conozca la realidad de la plantilla, que conozcas las capacidades del equipo. En función de eso jugarás de una manera o de otra. Tengo la ventaja de conozco al 70 o 75 por ciento de la plantilla y a los que no conocía los he visto jugar. Creo ahora mismo lo importante es que hay margen de mejora. La mayoría de jugadores están por debajo de su nivel, cuando veo a los jugadores los identifico y los relaciono con sus cualidades. Veo buenos jugadores pero después no la manifiestan en el campo”.
“Es obvio que, inmediatamente, después de volver, retiraremos las denuncias. Algún día he pensado que iba a volver. Lamento lo que le ha pasado a Karpin, siempre que veo una destitución lo lamento porque es una situación muy amarga para la persona que lo vive. Y no pensaba que en el transcurso de esta temporada pudieran ir las cosas mal”.
“Las cosas en la vida tienes que tomártelas como viene y afrontarlas. Me toco eso, para mí fue inesperado, era un momento ideal porque confeccionabas una plantilla y ese momento quedó truncado, ahora hay menos tiempo y todas las decisiones que se tomen tienen que ser más rápidas. Es más dificultoso pero a la vez es un reto. Lo que más me anima es que creo que la plantilla está por debajo de su potencial en rendimiento. Tienen mucho margen de mejora, su cabeza tiene que cambiar los pensamientos negativos por los positivos. Un equipo en el terreno de juego es el resultado de la mente y del trabajo realizado en el entrenamiento. Son las armas que tiene el entrenador. La comunicación con los jugadores es fundamental, hacerles creer que son mejores de lo que uno puede ser, elevar a cada uno a su máximo potencial”.
“Ahora el objetivo es ganar el próximo partido para acercarnos a los de arriba. No tiene ningún sentido empezar a multiplicar por tres y pensar que si hago tantos partidos voy acercarme cuando dependes de lo que hagan los rivales. Tenemos que centrarnos en competir y en ganar el próximo partido. Soy un empleado del club, si se estaban haciendo una serie de operaciones no voy a ir en contra de ellas. El equipo ha mejorado con los fichajes de invierno. Mi interpretación es que la plantilla es de las seis mejores de la categoría, tiene nivel, hay que hacer aflorar esta calidad. Ahora hay un trabajo más difícil que el que había a principio de temporada”.
“Si ahora tengo que hacer una alineación la voy a hacer, cogeré a once jugadores. Pero ellos saben, y así se lo he dicho, que la titularidad se gana en los entrenamientos y se pierde en el partido. Si a un jugador no le salen las cosas repetidamente tendré que poner a otro pero ese jugador no se tiene que rendir porque si después en el entrenamiento vuelve a estar bien, a estar acertado, puede volver a jugar”.
“He firmado contrato hasta final de temporada. Mi plan no es muy diferente al del inicio de la temporada. Creo que el equipo tiene que ser capaz de solucionar las diferentes dificultades a las que se tenga que enfrentar en un partido. Que sea lo más completo posible”.
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