Después de seis meses como primer entrenador del Xilvar he decidido presentar la dimisión a la junta directiva de mi ahora antiguo club. No ha sido una decisión tomada de manera impulsiva ni con intención de abandonar ningún «barco» ahora que habíamos tenido dos malos resultados. De hecho es por todo lo contrario,este gran equipo lleno de grandes jugadores necesita un cambio. En este deporte existen una serie de variables que son incontrolables,a veces entras en una dinámica donde ves que se entrena bien,que hay un buena actitud por parte de los jugadores,pero que los resultados esperados no llegan. El equipo está en situació de luchar por el ascenso,pero por los nombres que tenemos debería haver conseguido que estuviéramos mejor posicionados en la tabla a estas alturas. De esta manera con mi decisión intento ayudar al equipo a encontrar esa pizca de suerte que no hemos tenido y que los jugadores han buscado.Ver esas ganas en los jugadores y ver que yo no estoy ayudando al grupo como yo considero que debería, me ha llevado a dimitir.
Es un orgullo poder decir que tanto jugadores como directiva me han poyado a mi y a todo el cuerpo técnico en todo momento,incluso pidiendo que continuáramos, eso ha sido lo más difícil a la hora de tomar la decisión. Pero el cuerpo técnico y yo hemos pensado que era lo más sensato.
No me quiero extender más, simplemente animar al equipo a seguir trabajando y mantener el mismo ambiente que siempre ha habido y agradecerles el trato que nos han dado. Y de igual manera a la junta directiva,que nos han tratado como si fuéramos miembros de la familia.
El mundo del futbol te aporta un sinfín de vivencias,pero sobre todo nos quedamos con las personas con las que las hemos compartido.
Amunt Xilvar
Pedro J. Vargas y Toni Muñoz
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