Dia clave para los propietarios del Estadi Balear gran parte del futuro del emblemático campo de la via de cintura pasa por la asamblea general extraordinaria que tendrá lugar hoy a las 18.30 horas y en segunda convocatoria a las 19.00 horas. La asamblea se llevará a cabo en el edificio de la ONCE. En el transcurso de la misma que se presume importantísima y clave se decidirá de una vez el futuro del estadio palmesano. Se espera una buena asistencia de copropietarios. Sobre la mesa de la directiva que preside Damià Estelrich  presentará las cuentas anuales y la propuesta realizada por Ingo Volckmann, máximo accionista del Atlètic Balears, hace varias semanas y que incluye prioritariamente la reforma de la tribuna cubierta, el terreno de juego del estadio blanquiazul y el derribo de la tribuna sol y los dos fondos. Por su parte la Procampo dará a conocer su otra propuesta basada principalmente en que los propietarios no tengan que abonar dinero alguno por sus pases y que de hacerlo, en todo caso, sea un donativo. Además de esas peticiones, la Procampo solicitará a Volckmann el poder disponer de un local propio en el que reunirse y una cifra cercana a 30.000 euros anuales para poder llevar a cabo los gastos propios que genera la propia asociación de copropietarios.

Las contraprestaciones serían: Un contrato de cesión superior a los 50 años para el club blanquiazul y la explotación de la publicidad estática del recinto por parte de la directiva del equipo blanquiazul durante ese tiempo así como los ingresos que recibe la Procampo por la instalación de una antena de telefonía en los terrenos donde está el Estadi, que en un futuro se podrían llevar a cabo su reconstrucción aunque en este caso sería haciéndolo en diferentes fases.  En caso de que la votación de resultado positivo a una de las dos propuestas, lo acordado se trasladará al Atlètic Balears y poner todos los mecanismos en marcha.

En caso negativo, habría que buscar una nueva solución aunque todo apunta a que finalmente se alcanzará un acuerdo que sea satisfactorio para las dos partes. Damià Estelrich reconocía a este periódico “es más factible construir un nuevo estadio que remodelar el Estadi Balear”. Buscamos lo mejor para los copropietarios, porque no se trata de hacer negocio ni especular. Sino de dotar para siempre de un campo en propiedad para entrenar y jugar el primer equipo.

Si todo llega a buen puerto no es descartable que el equipo entrenado por Christian Ziege pudiera acabar incluso la próxima temporada jugando de nuevo en el Estadi Balear, un hecho este muy deseado por la afición del Atlètic Balears e impensable hace un año.

Todo dependerá, en caso de lograr el acuerdo, del ritmo que lleven las obras de reforma del estadi y de que los plazos marcados para la misma se cumplan finalmente.

El Estadio Balear fue inaugurado el 8 de Mayo con un partido internacional

El Estadi Balear se proyectó para sustituir el viejo campo de fútbol de Son Canals, el cual había sido el terreno de juego habitual del Baleares club de fútbol desde 1923 y del Altético Baleares desde 1942.

Los éxitos deportivos del club en pleno apogeo social y deportivo de la ciudad hicieron que el campo se quedase pequeño. Además, desde finales de los años 50 había problemas con los propietarios de los terrenos del campo, que ponían en entredicho su continuidad.

Estas circunstancias hicieron que se impusiese entre muchos entusiastas la idea de construir un campo nuevo y tenerlo por fin en propiedad.

A finales de 1958 se aprobó en Asamblea General el proyecto del nuevo estadio, diseñado por el prestigioso arquitecto Josep Barceló Moner con capacidad para 23.000 espectadores.

A principios de 1959 se compraron los terrenos y se emitieron títulos por valor de 5.000 y 10.000 pesetas para sufragar la compra y la construcción titulos A y titulos B.

El 19 de Julio se puso la primera piedra y poco después comenzaron las obras que finalizaron dentro de los plazos previstos.

El Estadi Balear fue inaugurado el 8 de Mayo con un partido internacional disputado contra el equipo inglés del Birmingham City, por aquel entonces uno de los equipos más potentes de la Liga inglesa.