Guillermo Ortego

El equipo de Yerai Rodríguez es séptimo en la clasificación a cuatro puntos del cuarto clasificado, el Alcúdia, cuando todavía restan 27 puntos en juego.

De descender a regional a soñar con jugar el play off de ascenso a Segunda División B en tan solo unos meses. Ésta es la situación que está viviendo el CE Mercadal a pasos agigantados en sus dos primeros años en la categoría, dos temporadas diametralmente opuestas en cuanto a números y objetivos se refiere.

Todo comenzó el pasado 17 de mayo en Sant Martí. El equipo entrenado en aquel entonces por Elías Noval empató el último partido de liga con el Campos y pese a finalizar la temporada fuera de los puestos de descenso, la debacle de los tres representantes insulares en la categoría de bronce, Eivissa, Penya Deportiva Santa Eulàlia y Atlético Baleares, arrastró a los rojiblancos en su caída.

Pero las renuncias a principios de verano del Cala d’Or y Soledat posibilitaron el regreso del equipo a Tercera, lo que se confirmó oficialmente el pasado 7 de julio. A menos de un mes y medio para el inicio de la competición, la directiva hizo un esfuerzo para armar una plantilla competitiva y que ofreciera garantías para lograr la permanencia y evitar los apuros de la campaña anterior. Pero las expectativas no sólo se han cumplido con creces sino que a falta de nueve jornadas para la conclusión, el equipo está en disposición de luchar por la cuarta plaza, que da acceso a disputar el play off de ascenso a Segunda División B.

La victoria en el Municipal de Sant Antoni, unida a la derrota del Alcúdia, al que todavía deben enfrentarse, sitúa al grupo de Yerai Rodríguez a cuatro puntos de conseguir algo insólito para la entidad que preside Damià Torres.

El Poblense, el próximo sábado en Sant Martí, es la primera piedra en el camino para un equipo con hambre y que, una vez conseguido el primer objetivo de la temporada, la permanencia, no renuncia a nada.

Damià Torres: “Es posible pero si no lo conseguimos no pasa nada”

El presidente del equipo, Damià Torres, se muestra muy satisfecho por cómo se está desarrollando la temporada, ya que a estas alturas hace unos meses era casi imposible pensar en tener la permanencia asegurada. “Era impensable pero el fútbol ya sabemos cómo funciona. A veces haces un equipo para jugar el play-off y no llegas y otras veces lo haces para salvarte y estás ahí”, señala.

Lo que está claro es que la permanencia ya está conseguida y a partir de ahora, todo lo que venga, bienvenido será. “El objetivo es ir partido a partido y quedar lo más arriba posible pero sin ninguna obligación. El verdadero objetivo, la salvación, ya está cumplido”, aduce.

Con los deberes hechos, el dirigente no renuncia a lograr ahora la cuarta plaza. “No tenemos presión, matemáticamente es posible y los jugadores tienen ilusión pero si no lo conseguimos no pasa nada”, finaliza.

DIARIO DE MENORCA