El Formentera, recién ascendido a Segunda División B por primera vez en su historia, se enfrenta a un curioso problema que le está impidiendo fichar jugadores al ritmo que desearía: no encuentra donde alojarles en uno de los espacios más cotizados del Mediterráneo durante el verano como es la isla pitiusa.

Desde mayo a octubre es prácticamente imposible encontrar un alojamiento en la pitiusa menor, y ese problema se lo está encontrando la directiva del Formentera. El club que preside Xicu Ferrer se muestra preocupado ante la imposibilidad de fichar a jugadores porque no puede ofrecerles un techo en el que cobijarse por lo menos hasta principios de noviembre.

«Este problema lo teníamos el año pasado, pero no era tan grave porque había muchos jugadores solteros y podíamos poner a varios juntos. Ahora hay muchos casados y por supuesto cada uno de ellos nos pide un alojamiento para la familia, algo que aquí es muy difícil en la situación actual», admitió ayer a este periódico Tito García Sanjuán, entrenador del Formentera.

«Hemos contactado con varios futbolistas que nos han dado el sí, pero luego nos encontramos con este problema que no sabemos cómo resolver, porque ni siquiera podemos mandarles a Ibiza ya que allí están igual y además deberían coger el ferry dos veces cada día», agregó el entrenador.

La directiva formenterense está trabajando a fondo y no pierde la ocasión de ir a por una habitación en cuanto ve alguna disponible, pero ahí se encuentra con otro inconveniente, el altísimo precio del alquiler durante los meses de verano que encarece cualquier operación de fichaje hasta límites muy por encima de las posibilidades económicas del club.

«A partir de finales de octubre todo cambia y hay mucho sitio disponible, pero nos quedan tres meses colgando y no sabemos qué podemos hacer», se lamentó el máximo responsable técnico del equipo.

Pedro Bonet
El Mundo