04-07-2017
El Real Mallorca sigue con la reestructuración interna, tras el descenso a Segunda División B, y que ya se ha cobrado las primeras víctimas. José León y César Mota recibieron este pasado lunes la carta de despido después de más de 30 años al servicio del club como jugador y trabajador.
León, exfutbolista del Mallorca y que llegó a ser todo un referente en el filial hace varios años, era el responsable de material y llevaba más de 20 años en su cargo. Mota, también exjugador del segundo equipo, combinaba sus funciones de masajista como ayudante. A los dos les dieron la carta de despido sin posibilidad de aceptar otra alternativa.
Tampoco seguirá el masajista Heliodoro Sánchez ni el fisioterapeuta Magí Vicens. Damià Amer, delegado del primer equipo en las dos últimas décadas, también dejará ese cargo para ocupar su nueva función como director de la Ciudad Deportiva. El cambio en la estructura del primer equipo es radical ya que afectará también al cuerpo médico. El doctor Tomeu Munar seguirá, en principio, como jefe de los servicios médicos del club. Pero algunos de sus ayudantes deben decidir en las próximas horas si aceptan la nueva realidad o, por el contrario, abandonan el club.
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